El aparato circulatorio es la estructura anatómica que comprende conjuntamente tanto al sistema cardiovascular que conduce y hace circular la sangre (torrente sanguíneo), como al sistema linfático que conduce la linfa.
El sistema circulatorio es un medio de transporte de nutrientes y oxígeno a todos los tejidos corporales, y también remueve de estos todos los desechos y el dióxido de carbono, productos del metabolismo.
Este sistema contiene cuatro componentes: sangre, como medio de transporte; vasos sanguíneos y vasos linfáticos, como red de distribución; y el corazón, que es el mecanismo de bombeo. El sistema circulatorio es accesorio al sistema respiratorio en el transporte de oxígeno.
En los vertebrados, el aparato circulatorio es cerrado y transporta oxígeno y nutrientes a los distintos tejidos y células. Consta de un sistema sanguíneo y de un sistema linfático. Está dotado de un corazón dividido en cámaras, de arterias, de arteriolas, de venas, de vénulas y de capilares.
En los animales acuáticos, hay un circuito sistémico y otro branquial.
En los vertebrados terrestres, el sistema sanguíneo es doble (circulación mayor o general, y circulación menor o pulmonar), es decir, no se mezclan la sangre arterial y venosa.
El corazón de los peces presenta dos cámaras, una aurícula, un ventrículo. Son dos aurículas y un ventrículo en los anfibios y reptiles.
En las aves y en los mamíferos, es tetracameral (dos aurículas y dos ventrículos), y con una serie de válvulas cardíacas.
Básicamente, todos los vertebrados tienen el mismo sistema circulatorio, el cual consta de un corazón muscular y tabicado, con propiedades contráctiles, situado en posición ventral. La contracción del corazón se propaga a todo el sistema mediante una onda que marca el sentido en que se mueve el fluido, actuando como una bomba que impulsa la sangre por los vasos. Estos forman un circuito cerrado que tiene tres tipos de conductos: arterias (llevan sangre del corazón a los tejidos, sus paredes son gruesas y expandibles), capilares (llevan la sangre al interior de los tejidos, unen las arterias con las venas) y venas (llevan sangre de los tejidos al corazón, sus paredes son más delgadas que las arteriales).
En el proceso evolutivo de los vertebrados, el corazón fue sufriendo una especialización desde los peces hasta las aves y los mamíferos, relacionada con el cambio de la respiración branquial a la respiración pulmonar.
1.5.1. SISTEMA CIRCULATORIO EN MAMÍFEROS
La circulación en mamíferos es doble (realiza 2 circuitos a partir del corazón) y completa. El corazón está dividido en dos aurículas y dos ventrículos, llevando la parte derecha sangre venosa y la izquierda, arterial.
Además, existe una complicada red de vasos venosos y arteriales que llegan a todas las partes del organismo. En el tejido sanguíneo, los eritrocitos maduros (glóbulos rojos) son anucleados.
Además de la circulación sanguínea, en los mamíferos, existe una abundante red linfática. La circulación de los mamíferos es la única que es similar al aparato circulatorio humano.
Presenta dos tipos de circuitos:
1.5.2. SISTEMA CIRCULATORIO EN OTROS VERTEBRADOS
1.5.2.1. Circulación en peces
En los peces, el corazón se encuentra en posición ventral, por debajo de la faringe y cerca de las branquias. Su disposición es lineal y consta de cuatro cámaras (seno venoso, aurícula, ventrículo y cono arterial o aórtico) comunicadas por válvulas que impiden el retroceso de la sangre.
La arteria branquial lleva la sangre a las branquias para su oxigenación. Por tanto, la circulación en estos animales es simple y completa, es decir, sólo existe un circuito y no habrá mezcla de sangres.
1.5.2.2. Circulación en anfibios
En los primeros vertebrados pulmonados (anfibios y reptiles no cocodrilianos), el corazón está en posición torácica y aparece una circulación doble, ya que existe un circuito menor o pulmonar, que lleva la sangre venosa a los pulmones y trae de vuelta al corazón la sangre arterial desde aquellos, y el circuito mayor o general, que lleva la sangre arterial al resto del cuerpo y trae de vuelta la sangre venosa al corazón.
En estos animales, el corazón tiene tres cavidades: dos aurículas (derecha e izquierda) y un único ventrículo muy musculoso. La aurícula derecha recibe la sangre venosa procedente del resto del cuerpo y la manda al ventrículo para que éste la bombee a los pulmones a través de la arteria pulmonar.
La aurícula izquierda recibe la sangre arterial procedente de los pulmones, la manda al ventrículo y éste la bombea al resto del cuerpo a través de la aorta. Entre las dos arterias, existe un pequeño tubo. Las aurículas se contraen de forma sucesiva, por lo que la mezcla de sangres en el ventrículo es escasa. De todas formas, la circulación doble será incompleta.
1.5.2.3. Circulación en reptiles
En los reptiles cocodrilianos, existe una división completa del ventrículo en dos compartimentos (derecho e izquierdo). Por tanto, el corazón ya es tetracameral y tiene dos cayados aórticos: el izquierdo, que sale del ventrículo derecho y lleva sangre venosa, y el derecho, que sale del ventrículo izquierdo y lleva sangre arterial. Se produce una pequeñísima mezcla de sangre en la aorta descendente. Por tanto, se considera que la circulación es doble y completa (aunque no totalmente).
1.5.3. SISTEMA LINFÁTICO
Es un sistema de vasos paralelo a la circulación sanguínea, que se origina en espacios tisulares del cuerpo, en los llamados capilares linfáticos.
Su función es la de actuar como sistema accesorio para que el flujo de líquidos de espacios tisulares vuelva a ser reabsorbido y pase a la circulación sanguínea. También es el encargado de eliminar las toxinas y la conservación de concentraciones proteínicas básicas en el líquido intersticial.
El sistema linfático representa una vía accesoria por la cual los líquidos de los espacios intersticiales pueden retornar a la sangre.
Está constituido por los vasos, los ganglios y el tejido linfático. Cumple tres funciones básicas: